En Sierras Chicas hace meses que no llueve y las condiciones hídricas continúan alarmando a la región. La cooperativa de Obras y Servicios de Río Ceballos reportó que el acumulado anual de agua está debajo del promedio histórico y esto hace que la situación sea cada día más preocupante.
Para Joaquín Deón, geógrafo e investigador de CONICET, vecino de las Sierras Chicas, se trata también de una crisis sistémica vinculada a los modelos económicos en el cual los grupos concentrados de poder deciden cómo explotar los recursos naturales.
“Pierden valor los inmuebles y el mercado inmobiliario los compra, los acapara, los somete a un proceso lento en un principio pero acelerado a penas la gente se va olvidando que pasaron las inundaciones y va generando allí cambios muy rápidos en el suelo”.
Más allá de fenómenos climáticos como el que dejó la niña, provocando sequías sobretodo en regiones semiáridas como la de sierra chicas, para Joaquín Deón, la sequía en realidad es una baja disponibilidad, el agua está siendo acaparadas en las cuencas porque las tierras están siendo acaparadas por grandes grupos de poder que se están quedando con las serranías de amplios territorios.
Para todos estos desarrollos se requieren cambios en el uso del suelo, transformar la cubierta vegetal que tienen los suelos para que estos puedan ser empleados con otra finalidad.
Finalmente el geógrafo aseguró que se deben proteger las cuencas: “La acciones que tenemos que tener en cuenta desde lo colectivo es fortalecer el cuidado de los territorios donde vamos a decidir habitar, desarrollar nuestras actividades, encontrarnos con otras personas y esos territorios son las cuencas”.