La incorporación de nuevas tecnologías de pulseras electrónicas para prevenir la violencia de género avanza y Córdoba será uno los lugares donde se realizarían las pruebas piloto.
Se trata de dispositivos telemáticos, equipos que se entregan a agresores y a víctimas, y que detectan la aproximación de los primeros a las segundas. A su vez, informan a un centro de monitoreo del posible incumplimiento de la orden de restricción impuesta por la Justicia.
María Fernanda Rodriguez, subsecretaria de Acceso a la Justicia de la Nación, explicó que la pulsera emite un “alerta” cuando quien la porta se acerca a la persona que lo denunció. Se trata de un sistema tecnológico de localización de personas a través de un dispositivo conectado a un GPS. También informó, que si bien el agresor podría romper o quitarse la pulsera, en estos casos “el sistema de seguridad automáticamente notifica al control de monitoreo”.
Rodriguez destacó que se eligió a Córdoba debido a que desde hace diez años viene trabajando innovadoramente en la lucha contra la violencia de género. Y que la presencia de juzgados y fiscalías especializadas en esta temática, como el centro modelo de monitoreo de vigilancia que se encuentra en el Polo de la Mujer, son ejemplos que no se encuentran ni siquiera en la ciudad autónoma de Buenos Aires.
El ministro de Justicia y Derechos Humanos, Luis Angulo, destacó: “Es resultado del trabajo que venimos llevado adelante conjuntamente con las autoridades nacionales para combatir la violencia contra la mujer”.